DECLARACIONES
DE
MARIANO RAJOY
Posición del PP en relación con la remodelación del Gobierno que acaba de anunciar hace escasos minutos el presidente del Gobierno, Don José Luís Rodríguez Zapatero, en el Palacio de
Quiero hablar en primer lugar de la forma en la cual se produjo esta remodelación, de la forma. Creo que lo que hemos visto, a lo largo de las últimas horas es muy revelador de la forma de gobernar de Rodríguez Zapatero.
Toda esta remodelación se ha producido en un ámbito que podemos decir ha sido un auténtico monumento a la confusión, al desbarajuste y a la pérdida de control de cómo se deben llevar asuntos de estas características. Cuando hablamos de la pérdida de control, en la acción de Gobierno. Cuando hablamos de la crisis económica, de lo que ha ocurrido en Kosovo recientemente y los problemas generados por nuestros aliados, cuando hablamos de las últimas decisiones judiciales que no sabemos si por culpa de la policía o por culpa de los jueces o por culpa de quien fuera, algunas personas que han cometido delitos, han sido puestos en libertad, estamos hablando de la falta de control en la actuación del Gobierno y las formas de esta crisis revelan que no hay ningún control y que el gobierno no actúa como debe actúa cualquier gobierno, que debe actuar con sentido común, con sensatez, sabiendo lo que hace, controlando los tiempos, y transmitiendo sensatez y tranquilidad a los ciudadanos.
En cuanto a la crisis. Hay un dato que es muy significativo. Este Gobierno no llevaba ni siquiera un año al frente de sus responsabilidades. Y el cambiarlo supone el reconocimiento de un fracaso. Un fracaso por parte del equipo, de las políticas y del presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero.
No hay precedentes de un Gobierno que cambie, y que sufra una remodelación tan importante, cuando no lleva ni un año al frente de sus responsabilidades. Esto es el reconocimiento explícito de un fracaso del presidente del Gobierno, del equipo nombrado por el presidente del Gobierno y de las políticas que ha llevado a cabo el presidente del Gobierno.
Último comentario sobre esta remodelación. No voy a entrar en los nombres, ni voy a hacer juicios sobre las personas, pero sí tengo claro que aquí no se ha nombrado a los mejores, y desde luego, no está ni mucho menos acreditado que las personas que ahora forman parte del Gobierno sean mejores que las personas que dejan ahora el Gobierno. Insisto. No se ha apostado, como requería la situación económica por la que atraviesa hoy día España, por los mejores.
Quiero decir, además, que lo importante es que se produzca un cambio en las políticas, y en concreto en la política económica, pero un cambio a fondo. Porque las decisiones que se han tomado han supuesto, como todo el mundo sabe, y ahora reconoce el presidente del Gobierno, un fracaso colosal.
Por tanto, lo que se necesita es un cambio de políticas y lo que se necesita también es un cambio en el estilo de gobernar. No se puede gobernar con improvisaciones, no se puede gobernar tomando decisiones un día y al día siguiente las contrarias. No se puede hacer una cosa que luego no entre en vigor nunca y que si entra en vigor no produce efecto alguno.
El Gobierno no tiene un plan. Gobierna improvisando, se le van ocurriendo las cosas y según se le van ocurriendo va tomando decisiones.
Insisto. Se necesita un cambio en la forma de gobernar y un cambio en la política económica. Y yo creo que este no es el objetivo de esta crisis de Gobierno que ha producido Rodríguez Zapatero
El objetivo es hacer un reajuste interno dentro del PSOE y tapar los disparates y situación de especial dificultad en la que se encuentra Rodríguez Zapatero.
Esta es la posición del PP sobre la crisis que se ha producido. Es una crisis que se ha hecho sin control alguno, que supone el reconocimiento de un fracaso, puesto que se cambia el Gobierno cuando no llevan un año. Es una crisis en la que no se apunta a un cambio de política económica, que es lo que precisa en este momento la sociedad española y es una crisis en la que no se apunta un cambio en la forma de gobernar de Rodríguez Zapatero.
Parece que se trata de resolver los problemas internos del PSOE y de tapar la desgraciada situación por la que se encuentra en este momento el Gobierno de España.